No seamos hipócritas

La Biblia nos amonesta y nos manda a tener cuidado de ser un hipócrita (Lucas 12:1…)

En ocasiones tenemos rasgos parecidos, porque decimos una cosa y hacemos otra.

Aquellos estándares que exigimos a las demás personas y que en realidad no los llevamos, a esto se llama hipocresía, por lo tanto no debemos de seguir estos ideales 

Lo que yo exija, predique o diga esto primero debe ser real en mí, que al vivirlo YO así lo de a los demás como guía.

Muchos lo hacen para denotar grandeza o piedad, que han construido con apariencia sobre sí mismo, poniéndose como ejemplo aunque sus fines estén alejados de la realidad.

La falta de honestidad, o el miedo al qué dirán nos pueden llevar a deshonrar el nombre de Dios 

En una ocasión mientras iba en el Metro Santo Domingo, una persona daba una referencia de alguien y decía que esa persona no era lo que decía ser porque sus actitudes iban contrarias a sus palabras.

Esto me choco mucho y me vi a mi mismo, pensaba lo que a veces digo y me pregunte que si eso que digo es lo que estoy haciendo o dando a los demás.

En una reunión del grupo de Jóvenes “Destino Norte”, de la Iglesia @PdBendicion dije que quería ser un gran ejemplo para los demás, tanto en la iglesia como para la sociedad y a las naciones. Es un gran deseo que llevo en mi corazón, el poder ser lo que dicen mis palabras.

Proponte ser honesto y habla siempre la verdad, que tu carácter y actitudes vayan acorde a lo que eres. Cuida de lo que dices y lucha de no aparte de la Humildad.

Sostenido de Dios, Él te ayudará a lograr estos grandes objetivos.


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